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Comunidad de Los Ángeles se une para apoyar a familia de niño hondureño asesinado

La imagen de Óscar Omar
La imagen de Óscar Omar Hernández durante la kermés realizada el domingo en el Valle de San Fernando.
(Eduard Cauich/LA Times en Español)

El sábado fue el funeral en la Iglesia Católica del Inmaculado Corazón de María en el Este de Hollywood, donde se encuentra una representación de la Virgen de Nuestra Señora de Suyapa, a la cual la familia le ha encomendado su dolor.

La familia Hernández no está sola en su dolor.

El domingo, los Hernández recibieron el apoyo de cientos de angelinos después de que su hijo menor Omar fuera asesinado, convirtiendo su Sueño Americano en una verdadera pesadilla.

Alejandra Hernández contó el domingo que vino de Honduras hace nueve años para acompañar a su padre, Óscar Daniel, quien había emigrado a Estados Unidos hace 12 años.

Su mamá, Gladys, y su hermano de 13 años, Omar, fueron los últimos de su familia en llegar a Estados Unidos hace tres años.

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El sábado fue el funeral en la Iglesia Católica del Inmaculado Corazón de María en el Este de Hollywood, donde se encuentra una representación de la Virgen de Nuestra Señora de Suyapa, a la cual la familia le ha encomendado su dolor.

Aún con mucho pesar en sus corazones, la familia realizó una kermés para recaudar fondos en la que todos sus integrantes estuvieron presentes y recibieron las condolencias de amigos, familiares y miembros de la comunidad que llegaron de distintas partes de Los Ángeles para consolarlos en la tragedia.

El cuerpo de Omar fue encontrado el 2 de abril, en Oxnard después de que fue a casa de su entrenador de fútbol en Lancaster y nunca regresó. El entrenador de 43 años, Mario Edgar García Aquino, fue arrestado con cargos de homicidio con circunstancias especiales por actos lascivos con un menor.

La kermés en Sun Valley re
La kermés en Sun Valley reunió a cientos de personas el domingo, a beneficio de la familia Hernández, originarios de Honduras.
(Eduard Cauich/LA Times en Español )

En los últimos días de su corta vida, Omar le había presumido a su hermana que estaba ya más alto que ella. A Omar le gustaba las piscinas y por eso estaba emocionado de ir a Lancaster para poderse meter en una de ellas, tal como se lo había prometido el sospechoso.

Alejandra, 28, quien ha sido en muchas ocasiones la vocera de la familia en estos momentos de inmenso dolor, dijo que siempre había compartido videos con sus hijos y Omar de que se cuidaran de los extraños.

“Yo le decía a mi hijo y a mi hermano, miren ejemplos, cuídense. No anden hablando con personas desconocidas y si alguien les da algo, no confíen. Pero jamás me imaginé pasar por este dolor”, declaró Alejandra.

García Aquino es acusado de matar a Hernández, de 13 años, y arrojar su cadáver en Oxnard

En la kermés hubo comida hondureña, guatemalteca, salvadoreña y mexicana en una residencia de Sun Valley en la que apenas se podía caminar por la gente que se reunió. En la parte frontal de la casa, estaba la mamá de Omar, aún sumamente impactada y consolada por decenas de personas.

La familia es de un pueblo hondureño llamado Marcala, La Paz, conocido por su producción de café.

“Uno no conoce a las personas, uno no sabe la maldad de la gente”, dijo Alejandra, quien recalcó que sus padres están siendo injustamente atacados en las redes sociales. “Somos de un pueblo. Tal vez somos de las personas que no le miramos mal a la gente”.

Alejandra recordó con dolor que su hermano siempre le pedía que lo fuera a ver jugar fútbol pero nunca pudo porque tenía que cuidar a sus tres hijos, de 9, 3, y 2 años.

Omar fue descrito como un niño tranquilo, amable y humilde, aficionado a Lionel Messi y el Barcelona, al igual que su hermano. Omar tenía metas de ser futbolista profesional o trabajar en construcción, como su padre y hermano.

“Mi mamá está bien triste, mi papá igual, pues es un vacío que nos deja en nuestros corazones la pérdida de él, un niño tan querido”, dijo Josue, de 25 años, con lágrimas en los ojos al recordar a su hermano menor.

Josue recordó que el último partido que Omar jugó fue con el equipo de su hermano. El domingo, Josue estaba sorprendido por la convocatoria que había recibido de la comunidad para ayudar económicamente a la familia.

“Yo pensé que mi hermano no tenía muchos amigos porque él era bien tranquilo, él no hablaba mucho”, dijo Josue.

En la reunión, el común denominador en las pláticas fue el subrayar la importancia de la precaución con los hijos, advirtiendo no confiarse a cualquiera y destacando la necesidad de vigilancia constante.

“Tenemos precaución con nuestros hijos. No confiarle los hijos a cualquiera”, dijo Luis Sosa, organizador del Desfile Hondureño de Estados Unidos y una de las personas que más ha ayudado a la familia Hernández.

El miércoles será el funeral en San Fernando Mission Cemetery en Mission Hills.

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